[Reseña] Bad, Bad Bluebloods (Rich Boys of Burberry Prep #2) - C.M. Stunich

Creo que la advertencia la diré en todos los libros, porque sigue el mismo patrón jajaja


Así es, tal cual al primer libro, acá pasó exactamente lo mismo. Así que, para evitar spoilers me aseguré, leyendo la última frase del prólogo con el último capítulo y sí, es el mismo. Dependerán de ustedes si quieren leerlo o no. Puede que no les de sentido, pero algunas cosas de ahí lo recordarán durante el avance del libro, y siento que sí, pierde la magia.

Pero nuevamente, eso dependerá de ustedes.

Una vez más, les adjunto el mapa de la academia, que sí, tampoco usé, pero puede que ustedes sí.


El libro comienza tal cual donde terminó el primero. Unas semanas para que nuestra protagonista pueda ordenar sus ideas, repasar su lista para que la acción comience nuevamente cuando ponga un pie sobre la academia.

Estaba bastante inquieta mientras comenzaba a leer el libro. ¿Se acuerdan que en la reseña del libro pasado comenté que no veía a nuestra protagonista con dotes de venganza? Pues me retracto completamente. Marney llegó como una badass, una chica mala y me sorprendió. En verdad confieso que no vi en ella esa pisca de vendetta, pero sí, la tiene y sí la supo usar. Intentó hacerlo todo sola al principio, porque era de esperarse, no confía en nadie, y tampoco tiene apoyo, pero a medida que las páginas avanzaban, Zack, Miranda y Andrew se volvieron sus aliados ideales.

Tengo sentimientos encontrados con respecto a Zack. Marney creó esta especie de lista, que se mencionó al final del primer libro, donde tiene los nombres de todos quienes la hicieron pasar un pésimo año. A cada uno de ellos, Marney les tiene una especie de venganza que espera ser el toque final para cada uno. No quiero mencionar la que le tocó a Zack, pero la sufrí, porque Zack está muy arrepentido. Se nota en cada acción que hace por el nombre de Marney, y pues, ella llevó a cabo su venganza de igual manera. Sabemos lo que Zack le hizo a Marney, y dios, es atroz, pero no sé, llámenme corazón de algodón, pero es que me incomodó ☹

¡Ohhh! Y el nuevo personaje que entró a desordenar a estos chicos. Príncipe de Inglaterra, Windsor es todo un carismático. Con la introducción que se le hace en el mismo libro, me imaginé algo completamente distinto. Me encantó. A diferencia del trío de ídolos, Wind, como le gusta que lo llamen, es verdad no le importa lo que piensen de él, o las consecuencias de sus acciones. A diferencia de Tristan, Credd y Zyad que sí les importa, solo aparentan lo contrario, Wind en verdad, no le importa. Es un personaje totalmente refrescante. Puede que sea uno de mis favoritos.

‘Un regalo de amistad’ me dijo, guiñándome un ojo, mientras me quedo boquiabierta y miro entre él y el grupo de chicas del Círculo Interior revoloteando sobre su ídola que ahora llora. ‘Tenemos la misma clase ¿no? ¿caminas conmigo?’ Windsor me ofrece su brazo, y es ahí donde decido que es una buena persona, oh, una maldita y excelente persona.

Con respecto a las otras venganzas del resto de los chicos, fueron bastante brutales. Marney los golpeó donde más les dolía y siempre intentando testigos cercanos. Su plan ideal, era que básicamente entre ellos se hundieran, pero luego llegaría a rematarlos con el movimiento final. Sin embargo, a pesar que nuestra protagonista acá llegó más empoderada que nunca, aún así, no sentí el mismo que con el primer libro. Acá los chicos fueron algo pasivos a los que fueron en el primer libro, y en verdad estaba mentalizada para una guerra.

La venganza es perversamente dulce, pero el perdón es una virtud. Lástima que nunca he sido santo.

El final del libro, fue inesperado sí. No el mejor del mundo mundial como digo, pero sí da entrada para la continuación. Marney aún no sabe para dónde va la micro como decimos en Chile, no sabe qué elegir, así que, sí, aún en el libro dos, no sabe qué debiera elegir.